Puerta San Giovanni

Construida por el Papa Gregorio XIII e inaugurada en 1574, la puerta de San Giovanni es una de las puertas de las Murallas Aurelianas que aún hoy resguardan el centro histórico de Roma.

 Se llamó así porque en sus inmediaciones se encuentra la Basílica de San Juan de Letrán , la catedral de Roma. 

La incertidumbre sobre el nombre del autor es consecuencia de las crónicas de la época que hablaban de un noto arquitecto llamado Giacomo. La tradición popular romana, sin embargo, asigna a ciencia cierta la obra a Della Porta y hasta le hace morir cerca de la puerta "que él mismo construyó", debido a una indigestión de melón y sandía, después de una excursión a los Castelli Romani.

La Puerta San Giovanni, que daba acceso desde la calle Campana hasta el campo -la actual Via Appia Nuova- fue edificada por el emperador Aureliano para suplir la Puerta Asinaria que, construida entre el 270 y el 273 por el emperador Aureliano, ya se encontraba bajo la superficie de la calzada y no cumplía con las necesidades del tráfico rodado de entonces.   

La puerta, muy sencilla y sin bastiones, torres o almenas, no parece una estructura de defensa y fortificación militar, sino más bien una majestuosa puerta de entrada a una gran villa noble. Una decoración en aparejo almohadillado enmarca nuestra puerta y un gran rostro barbudo decorativo precede la lápida conmemorativa que nos informa sobre su realización: “GREGORIVS XIII PONT. MAX PVBLICAE VTILITATI ET VRBIS ORNAMENTO VIAM CAMPANAM CONSTRAVIT PORTAM EXSTRVXIT ANNO MDLXXIIII PONT. III”

Los arcos laterales se abrieron por razones de tráfico a principios del siglo XX, cuando, en lugar de los palacios residenciales y de la Via Appia Nuova, había campos y prados, casas rurales, viñedos y pérgolas de posadas, en donde los romanos disfrutaban de una excursión, precisamente, “fuera de la puerta” .